¡Hola! ¿Tienes pie plano? Te alegrará saber esto. Más que una patología, es una forma de caracterizar la forma de tu pie. Las dos formas principales de pie con el pie cavo (arco alto), y pie plano (arco bajo). Entonces, ¿Cuándo debo preocuparme? Si no te duele, en general no hay ningún problema, y tu pie se considera un pie normal, libre de patología. Sin embargo, si presentas dolor, la situación es distinta. El dolor se produce cuando la forma de tu pie, está generando sobre-carga de alguna estructura, ya sea tendón, articulación, o hueso. Esta sobrecarga en general se asocia a algún cambio sutil en la forma de tu pie, principalmente un leve aumento del pie plano, o sea, un leve colapso de la forma. Es en general, este colapso, el que lleva a des-ajustes de las estructuras, generando dolor, o fatiga. A esto se le llama un pie plano valgo sintomático.
El pie plano valgo sintomático puede generar dolor de múltiples localizaciones y características, sin embargo, los puntos de dolor más frecuentes son: En la zona interna del tobillo, por sobrecarga del tendón de un músculo llamado tibial posterior, en la zona externa del tobillo, por la sobrecarga articular en una zona llamada seno del tarso, o en el arco del pie, debido a la sobrecarga del tendón del músculo tibial posterior o la sobrecarga de las articulaciones que están en relación al arco del pie. También, a veces, puedes sentir incomodidad con los zapatos, debido a que la deformidad del pie no permite que tu pie se acomode bien con la forma de estos.
Afortunadamente, hay medidas que puedes tomar para aliviar estos síntomas y mejorar la salud y el bienestar de tus pies, y estas tienen una gran efectividad.
El primer paso es realizar una evaluación completa de la forma tus pies, y examinarte detalladamente para localizar la estructura específica que te está causando dolor. Para completar esta evaluación, te solicitaré radiografías en carga, de ambos pies y ambos tobillos, ya que eso nos ayuda a categorizar específicamente la forma en la que los huesos de tu pie están dispuestos, e identificar también posibles causas para tu dolor.
Una vez con el diagnóstico específico de la estructura que genera dolor, y categorizando en detalle la forma de tu pie, contamos con múltiples herramientas que te pueden ayudar para hacer todas tus actividades libre de dolor.
Las plantillas ortopédicas, son un tratamiento de gran efectividad para el manejo del dolor. Se diseñan a medida, para proporcionar un soporte adicional en ciertas zonas, para obtener una mejor distribución del peso en el pie. Antiguamente se creía que las plantillas podían corregir la forma del pie de forma permanente, sin embargo, en los últimos años, se ha observado con claridad, que ellas sólo ayudan con el dolor, y no corrigen la forma del pie de forma permanente. Sin embargo, esto no es problema, ya que las puedes usar por todo el tiempo que las necesites, a permanencia.
El resultado que obtengas de las plantillas depende mucho del lugar donde las hagas, ya que es un arte poco estandarizado, y múltiples lugares las diseñan de distintas formas. Te recomendaremos los mejores lugares para que puedas tener el mejor resultado.
Es importante considerar que las plantillas no son una solución mágica y deben combinarse con otros tratamientos y medidas de cuidado del pie, como el uso de zapatos cómodos y de buen soporte y la realización de kinesioterapia, que consiste principalmente en ejercicios de fortalecimiento, balance, y estiramiento. Nuestros kinesiólogos Benjamin Pizarro y Annie Stappung, que se dedican específicamente al manejo de lesiones y patologías del tobillo y del pie te ayudarán para lograr la mejor funcionalidad de tu tobillo y pie.
Si tienes pie plano, y no sabes bien si podrías beneficiarte de un tratamiento para mejorar tu funcionalidad, te invito a visitar nuestro sitio web y agendar una consulta médica conmigo, el Dr. Sebastián Drago en el siguiente link: www.doctorsebastiandrago.cl. Los kinesiólogos Annie Stappung y Benjamin Pizarro te podrán evaluar también, y ayudarte con consejos para mejorar la función de tu tobillo y pie ¡Te esperamos!.